La Unión Europea ha dado un paso decisivo para reducir el impacto ambiental de los coches eléctricos: el Consejo de Ministros aprobó en mayo de 2025 la Directiva de Baterías Sostenibles, que entrará en vigor a principios de 2026.

🔋 1. Contenido mínimo de materiales reciclados
Todas las baterías nuevas para vehículos eléctricos deberán incluir al menos un 30 % de materiales secundarios (litio, cobalto y níquel) reciclados, elevando este porcentaje hasta el 50 % en 2030. Esto reduce la extracción de materias primas y fomenta la economía circular.

🏷️ 2. Etiquetado ecológico obligatorio
Cada batería mostrará una etiqueta de eficiencia con datos sobre:
- Huella de carbono de su fabricación
- Porcentaje de materiales procedentes de reciclaje
- Vida útil estimada en ciclos de carga
Los consumidores podrán comparar y elegir según criterios medioambientales.
🔄 3. Responsabilidad Extendida del Productor
Los fabricantes asumirán el coste de recogida y reciclaje de las baterías al final de su vida útil. Se crearán puntos verdes en concesionarios y talleres para facilitar la entrega gratuita de baterías usadas.
♻️ 4. Objetivos de reciclaje y recuperación
La normativa fija metas de recuperación del 95 % del peso de la batería y 90 % de los metales críticos. Los procesos avanzados de pirometalurgia e hidrometalurgia deberán garantizar un reciclaje eficiente.
🌞 5. Estaciones de carga con energía renovable
Para complementar, la Directiva impulsa que al menos el 20 % de los puntos de recarga pública se alimente directamente de fuentes renovables (solar, eólica o biomasa), promoviendo cargadores off-grid y sistemas V2G.
Con estas medidas, la UE busca que la electrificación del transporte sea verdaderamente sostenible, cerrando el ciclo de las baterías y garantizando que el auge del vehículo eléctrico no genere nuevos problemas ambientales.